En la competición participaron cerca de 40 mujeres de todas las edades. | M. À. Cañellas -
De forma popular, se le conoce como danza del vientre, una concepción superficial de un arte con mucha más historia, que no se limita al contoneo de las caderas. El hotel Reverence Mare, de Palmanova, se ha convertido este fin de semana en la capital mediterránea del Raks Sharki, las danzas folclóricas del Medio Oriente, con el gran Festival Bellydance. «Es el primer festival que organizamos desde la pandemia. Su objetivo es fomentar la danza oriental y la competición en esta disciplina de baile. En los países eslavos orientales le han dado otro enfoque, más competitivo, empiezan a aprender las danzas desde pequeñas. Ahora bien, en la Isla también ha evolucionado mucho y, gracias a Internet, es mucho más accesible. Puedes tomar clases con maestros de renombre a través de 'Zoom'; la tecnología ha ayudado mucho. Y la pandemia también ayudó a este cambió», afirma Nadia Guesso, bailarina y maestra de danza oriental desde 2003, y coorganizadora de este festival junto a la italiana Zara Luna.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.