TW
1

El final de la feria turística más importante, la World Travel Market, que se celebra en Londres, ofrece unas perspectivas turísticas casi inmejorables de cara a la próxima temporada. El encuentro en la capital británica ha sido el colofón de unos meses en los que, tras unas semanas titubeantes, el mercado turístico ha seguido una tendencia al alza en Baleares; una progresión inimaginable en los primeros momentos. Esta buena posición en los mercados internacionales indica que se mantendrán durante el 2022. La circunstancia alimenta un indisimulado optimismo y sobre el que, vistos los precedentes, resulta obligado ser cautos.

Un destino seguro.

La persistencia del Govern y del resto de instituciones, junto con la labor del sector, ha logrado calar en los principales países emisores –entre los que destaca el Reino Unido– que Balears es un destino vacacional seguro. La pandemia marcó, sin duda, la pasada temporada turística y todo indica que el próximo año quedará atrás, de manera definitiva, esta tragedia, que sólo en las Islas ha dejado más de un millar de fallecidos. El esfuerzo colectivo se ha visto compensado no sólo por el comportamiento de la demanda del pasado verano, sino también de cara al próximo ejercicio.

Ampliar la temporada.

Los planteamientos de cara al futuro incluyen premisas ya conocidas por el sector, como son la prolongación de la temporada y la búsqueda de nuevos atractivos. En esta última opción destacan las actividades vinculadas al deporte. Como en todo lo relacionado con la principal industria balear, la controversia sobre la huella medioambiental que deja la actividad turística ha vuelto a plantearse. Prolongar la temporada supone mejorar las condiciones laborales de los trabajadores. La cuestión central del debate es garantizar la sostenibilidad y en este terreno los avances logrados no son despreciables.