La contundencia del fallo de la Audiencia Provincial, que absuelve a todos los procesados, confirma el atropello judicial en que el juez Manuel Penalva y el fiscal Miguel Ángel Subirán convirtieron el ‘caso Cursach’. La sentencia abre incluso la posibilidad de que a ambos sujetos se les pueda acusar por nada menos que 28 detenciones ilegales, lo cual redunda en el enorme despropósito que supuso una instrucción viciada desde su misma esencia. No debe ser sencillo encontrar un episodio similar en la historia de la justicia española desde la instauración de la democracia. Resulta evidente que es imposible restituir el daño causado a personas inocentes privadas de libertad de manera arbitraria y sin pruebas y cuyo honor fue mancillado sin causa.
La Audiencia pone fin a las tropelías de Penalva y Subirán
23/12/22 0:29
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2 comentarios
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Será que ahora Penalva y Subirán tienen la culpa de todo incluido lo de Kennedy, como si todos los demás actores judiciales superiores, los estamentos políticos y los responsables mediáticos no hayan tenido ni pizca de responsabilidad.
La gent ja no creu en la justícia. Una justícia que per lo vist vol fer política impedint al legislatiu, aquí, condemna inocents, no pot desxifrar qui és en m.rajoy.. la sensació de que tot es pot comprar està generalitzada i això és molt dolent per la convivència