E l primer paso conceptual se efectuó desde hace algún tiempo y consistió en lo siguiente: el punto esencial en el tema de la pederastia es la víctima del abuso. En la mentalidad del común de los mortales se mantiene ya como incuestionable que todo abuso debe plantearse desde la herida de la víctima. Ahora, va verificándose lo que ya se percibe como el segundo paso en la cuestión planteada: por «víctimas» no debe entenderse «unas víctimas» sino «todas las víctimas».
El interrogante que abrió este frente fue: ¿cómo lo estará pasando aquella parte de víctimas que, constituyendo la mayor parte de ellas, experimenta que merece una menor atención? ¿Cómo no estará indignada si, sufriendo el mismo daño que las otras, se las orilla? Ya muchos advierten que incluir unas víctimas y excluir otras constituye, por parcial, un modus operandi sospechoso.
Por idéntico abuso y por idéntico daño no hay víctimas de primera y de segunda. De lo cual se deriva que, además de políticamente sospechosa, resulta conceptualmente arbitraria toda comisión que, en su investigación, sustituya el todo por la parte. Más arbitraria aún hubiera resultado si la decisión de investigar una parte de los abusos proviniera de unas Cortes que, por definición, debe atender el interés general: el de todos, y el de todos por igual.
1 comentario
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... básicamente, estamos de acuerdo... durante demasiado tiempo se ha permitido que se investigaran, encausaran y juzgaran SÓLO a una parte de las víctimas de abuso de menores, las de la sociedad secular, la que enseguida que ocurren estos casos, se llama a la policía, ésta actúa y se manda a los sospechosos al calabozo, se les hace escarnio y luego se les juzga, y pagan su pena en prisión... durante demasiado tiempo hemos visto que había una parte de las víctimas que quedaban ninguneadas, olvidadas, pues la justicia se inhibían en beneficio de esa cosa rara que llaman derecho canónigo, que no es sino dar alas para que la iglesia proteja a sus miembros díscolos ocultando el delito, movilidad geográfica y el peligro de aumentar el número de víctimas en otro sitio... ya está bien, esa negligencia de nuestra sociedad para con las víctimas de abusos por los pederastas del clero no debía quedar más impune, y por eso se monta esta comisión, para señalar con el dedo a los causantes, pederastas enfermos miembros del clero, a los cómplices necesarios, la iglesia que ocultó al tiempo que negaba, y a los ineptos que no hicieron de oficio su trabajo y se abstuvieron de intervenir con la surrealista excusa de que ese estado extranjero tiene sus propias instituciones, olvidando que vivimos en sociedad y nuestras leyes nos obligan a todos, incluidos a los que se creen por encima del bien y del mal... por una vez estoy de acuerdo con usted, que no hay que olvidar a esas víctimas como se ha hecho hasta ahora... ya está bien...