Leonor de Borbón: Reina de Mallorca

Desde Vox, queremos expresar nuestro más profundo agradecimiento a las entidades y personas que harán posible este nombramiento. La Hermandad Monárquica de España y el Partido Popular han desempeñado un papel crucial en este proceso, demostrando una vez más su compromiso con los valores que la monarquía representa para nuestro país.

Sin embargo, no todos comparten esta visión positiva. Algunos opinadores, calificando el nombramiento de extemporáneo y grotesco, y partidos como Més, anunciando su voto en contra, hace que se torne en esencial abordar estas críticas constructivamente. Y es que la relación de la Familia Real con Mallorca, y el significado profundo de este reconocimiento, trascienden las disputas políticas cotidianas, y deberían centrar el debate en la celebración de la unidad nacional y el respeto por las instituciones.

Este acto de reconocimiento a la princesa Leonor refleja un vínculo profundo y afectivo que la heredera al trono mantiene con Mallorca, pues debemos recordar, que entre los muchos títulos que ostentará, se encuentra el de Reina de Mallorca; un lazo que será un claro testimonio del amor y el compromiso de la princesa Leonor con nuestra isla. Por ello, el nombramiento como Hija Adoptiva de Mallorca es un paso adelante en la consolidación de estos lazos, celebrado como una muestra de unidad nacional y apoyo a la monarquía española.

En definitiva, este nombramiento no es solo un tributo a la princesa Leonor, sino también una celebración de los valores compartidos por la sociedad mallorquina y española en su conjunto. Frente a las críticas abusivas e hirientes, es tiempo de diálogo constructivo y de reconocimiento de lo que verdaderamente importa para el futuro de Mallorca y de toda España. La monarquía, con la princesa Leonor a la cabeza de la próxima generación, simboliza la unidad y la continuidad de la Nación española, aspectos esenciales en tiempos de cambio y turbulencia. Desde Vox, nos enorgullecemos de haber estado a la vanguardia de este reconocimiento y haciendo mías las palabras del presidente Galmés: «Estoy cómodo con el pacto con Vox, somos un único cuerpo», en consecuencia actuemos con lealtad, y anticipémonos con alegría a los frutos que esta unión de fuerzas pueda traer para el futuro de nuestra monarquía parlamentaria.