TW
4

El circo okupa en las urbanizaciones de Son Parc y Coves Noves, al norte de Menorca, es pasto de críticas en todas las tertulias televisivas y una de las noticias más leídas en los medios digitales de España.

La andaluza María Iguazo, que ha saltado a la fama por el desparpajo con el que se expresa ante las cámaras, conocida como la okupa Beyoncé de Menorca, se jactado en las redes del chalé de Coves Noves, donde está muy cómodamente instalada. Es una espaciosa vivienda de nueva construcción, valorada en 670.000 euros, donde vive con su marido, que trabaja como jardinero, y sus cinco hijos. Pero es su segunda casa en la Isla, al tener okupado un adosado situado en Son Parc.

Al tener los menores a su cargo, percibe un ingreso mínimo vital de 1.500 euros mensuales. María Iguazo afirma contar con el asesoramiento de una abogada que le recomienda quedarse para evitar que la puedan echar. Advierte que «con los niños no me pueden echar». A través de Whatsapp reclama su derecho a seguir okupando el lujoso chalé que estaba a la venta, que han acabado estrenando ella, su marido y sus hijos. Así, todos felices.

Estos hechos, y su impacto mediático, suscitan una ola de indignación en Menorca. La inmobiliaria que comercializa las viviendas de Coves Noves clama ante la pasividad de las autoridades y los jueces. La inseguridad jurídica que provoca es enorme, advierten, desolados porque la legislación ampara más a quienes entran y se atrincheran en casa ajena que a los propietarios.

La Guardia Civil y la Policía Local van y vienen, pero la familia Iguazo sigue allí. La okupa Beyonzé de Menorca ha sido denunciada por adelantamiento peligroso, conducir su BMW sin carné y dar positivo en cocaína. Incansable, reclama, sin rubor, «un alquiler que pueda pagar».

Y el ciclista Perico Delgado, ganador del Tour de Francia, pregunta: «¿A esto van mis impuestos?».