La entrega de los Siurells reunió a empresarios, sindicalistas, políticos, ecologistas, profesionales de la sanidad y deportistas en una amplia representación de la sociedad mallorquina
Un emocionado Gabriel Escarrer entrega el Siurell a Miquel Fluxá. | M. À. Cañellas
Ver a dos personas en un escenario dedicándose alabanzas puede ser algo común, pero si esas dos personas son Gabriel Escarrer y Miquel Fluxá, la cosa ya no es tan ordinaria. Si además se añade que ambos se quitaron por un momento su traje de empresario para ponerse el de amigos y admiradores mutuos, el momento se convierte en algo especial. Se vio en la gala de entrega de los Siurells de Plata, a la que Escarrer quiso ir a pesar de haber sufrido un ataque de ciática, algo que solo se hace por un buen amigo. «Fui el maestro de Miquel pero es evidente que el alumno ha superado al maestro», dijo Escarrer de su amigo. Recibía además, el Siurell de Honor que lleva el nombre de Pere A. Serra, otro gran amigo de ambos, así que la emoción fue intensa.
La gala de los Siurells les reunió junto a otros representantes de la sociedad mallorquina, un amplio elenco de autoridades, como la presidenta Francina Armengol, la presidenta del Consell, Catalina Cladera, el alcalde de Palma, José Hila y el president del Parlament, Vicenç Thomàs, representantes de los distintos partidos políticos, como Jaime Martínez y Sandra Fernández, del PP, y alcaldes de todos los colores, como el socialista Virgilio Moreno (Inca), el ‘popular’ Carlos Simarro (Sóller)o el ecosoberanista Miquel Oliver (Manacor).
También hubo representación del mundo judicial, con el presidente del TSJIB, Carlos Gómez, y el presidente de la Audiencia Provincial de Baleares, Diego Gómez-Reino, como ejemplo, así como representantes de la Policía, con el jefe Superior, Gonzalo Espino o el coronel jefe de la Guardia Civil, Alejandro Hernández.
El rector, Jaume Carot, y el obispo, Sebastià Taltavull, o Carmen Dameto también estuvieron en la cita para mostrar su reconocimiento a los premiados. Hubo ecologistas, como Xavier Pastor, que en su día lucharon para que Cabrera fuera un paraíso, sindicalistas, como José Luis García, con la buena noticia de los datos del paro, y empresarios, liderados por la presidenta de la CAEB, Carmen Planas en representación de la patronal empresarial de las Islas. También el presidente del CES, Rafael Ballester, o el president de la Autoritat Portuària de Balears, Francesc Antich.
Las grandes empresas de Baleares tuvieron presencia en la gala, como Adalmo, con su director general, Juan Alba. En representación de Tirme estuvo su director general, Rafael Guinea, y por parte de Endesa, Martí Ribas, director general de la empresa en Balears. Rosa Regi, presidenta de Quirón Salud Baleares, llegó poco después de que lo hiciera Antonio Sánchez Grao, de El Corte Inglés. Del sector bancario estuvieron la directora territorial de CaixaBank, María Cruz Rivera, y Celia Torrebadella, directora territorial del Banco de Santander. También hubo presencia del mundo del deporte para arropar a la galardonada, como Miquel Bestard, presidente de la Federación de Fútbol de les Illes Balears, y de la cultura y el periodismo, con la directora general de Cultura, Catalina Solivellas, y el director general de IB3, Andreu Manresa, entre otros.
Una entrega de premios entretenida y con elementos musicales
El actor Félix Pons, que interpreta al president del Govern en la serie Sicíla sense morts, que graba IB3 y emitirá en breve, hizo de maestro de ceremonias de una gala entretenida, en la que cada invitado fue recibido con una música ad hoc, cuando subió al escenario. Hubo actuaciones musicales y hasta un número de baile antes de la cena en Son Termes.