JAVIER JIMÉNEZ ¿Quién iba a sospechar de un canario con facciones
aniñadas y formas angelicales? Piolín, el emblemático personaje
creado por la Warner Bros, ha acabado un año más, y ya es el
segundo consecutivo, en los «calabozos» de la Comandancia palmesana
de la Guardia Civil. La acusación: falsificación.
Hace algunos días el Grupo de Investigación Fiscal y Antidroga
(GIFA) recibió la denuncia del representante de la multinacional
estadounidense, en la que aseguraba que se estaban vendiendo
ejemplares de piolín y otros muñecos falsificados en la Fira del
Ram de Palma.
El pasado martes varios agentes se desplazaron hasta el recinto
ferial e inspeccionaron algunas casetas y tómbolas, en busca del
«sospechoso». Poco a poco fueron examinando peluches de pequeño
tamaño, de entre tres y dos palmos de altura, y los requisaron
porque atentaban contra la propiedad industrial, es decir, se
trataba de falsificaciones. En otros casos, los feriantes afectados
pudieron documentar la procedencia legal de los piolines y conejos
de la suerte.
Tras una tarde «distinta» los miembros del GIFA, habituados a
las operaciones Antidroga y a alijos cuantiosos, se retiraron de la
Fira del Ram con un centenar de personajes de la Warner Bros en su
poder, valorados en unas 500.000 pesetas.
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