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Dos años de cárcel y dos años de suspensión. Esta es la condena que deberán cumplir dos agentes de la Guardia Civil destinados en Eivissa, que han sido declarados culpables de un delito de atentado grave contra la integridad moral. La sentencia, dictada por el tribunal de la Sección Primera de la Audiencia, condena a José Luis C.R. y Jacinto Carlos R.D. Los hechos, que fueron juzgados en Eivissa, ocurrieron en la madrugada del día 8 de septiembre del pasado año. Los dos condenados se encontraban prestando servicios de paisano sobre las cuatro de la madrugada. Se movían con un vehículo camuflado y ambos vestían de paisano.

Según refleja la sentencia, los guardias civiles se dirigieron al aparcamiento de una conocida discoteca de la ciudad de Eivissa. Allí se encontraba conversando un grupo compuesto por unas diez personas. Los guardias creían que los jóvenes estaban reunidos fumando hachís y por ello se acercaron hacia el grupo.

La sentencia señala que uno de los agentes se dirigió a un joven, de 17 años de edad, y le preguntó «si iba de listillo o de graciosillo». Al mismo tiempo que le decía estas palabras le propinó un cachete en la nuca, en presencia de sus compañeros. El joven reaccionó y empujó al guardia civil, que a continuación le exhibió su placa que le identificaba como agente de la autoridad. La sentencia señala que el guardia civil condenado ordenó a los jóvenes que se dirigieran hacia el vehículo policial. El joven que tuvo el enfrentamiento fue agarrado por el brazo por el agente, mientras que su otro compañero sacó su pistola, la montó por dos veces y se la colocó a la víctima en la nuca.