El ministro de Relaciones Exteriores de Venezuela, José Vicente
Rangel, informó ayer de que entre 200 y 250 personas han fallecido,
150.000 han resultado damnificadas y cerca de 7.000 están
«extraviadas». Rangel señaló que el número de fallecidos puede ser
mayor pero que es una «temeridad» informar sobre otras cifras en
esta situación de gravedad. Las 150.000 personas son damnificados
de todo el país, específicamente de los Estados Vargas, ubicado en
el litoral central, Caracas, Yaracuy, Zulia, Falcón, Nueva Esparta,
Miranda y Sucre.
El canciller consideró mejor llamar «extraviados» a las personas
que han sido dadas como desaparecidas, puesto que algunas de ellas
estarían apareciendo en las últimas horas. Las personas fallecidas,
los damnificados y los «extraviados» son consecuencia de los
torrenciales aguaceros caídos en el país durante los últimos días,
especialmente en la zona del litoral central, la más afectada en
todo el país.
Durante las operaciones de rescate se han dado casos como el de
una mujer que dio a luz en el helicóptero de salvamento que la
transportaba junto a otros supervivientes de los torrenciales
aguaceros caídos sobre el litoral central venezolano. Leomela
Martínez, de 22 años de edad, tuvo su bebé pocos minutos después de
que los cuerpos de rescate la sacaran del lodazal y la subieran al
helicóptero que la transportaría a las instalaciones del aeropuerto
de Maiquetía, a donde se llevan las víctimas de la tragedia del
Estado de Vargas.
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