Cuatro jóvenes, entre los que se encontraba un menor,
protagonizaron en la madrugada de ayer un incidente en las calles
de Es Rafal, donde supuestamente robaron un coche con el que luego
se estrellaron en la Camí Salard, cerca de Son Banya. En una
declaración espontánea, uno de los implicados declaró a la policía
que se dirigían a «pegar un palo».
Los hechos ocurrieron cuando un Fiat Uno con placas de matrícula
PM-BS, que se encontraba estacionado en la barriada de Es Rafal,
fue sustraído por los cuatro zagales. Testigos presenciales
observaron cómo el turismo circulaba a gran velocidad y de forma
temeraria, y esa conducción agresiva motivó que, al final, el coche
se estrellara contra un muro del Camí Salard. La colisión fue
aparatosa, pero los muchachos pudieron apearse y se alejaron
corriendo. Los vecinos que presenciaron el episodio dieron aviso al
092 y en pocos minutos una patrulla se desplazó hasta allí y
emprendió la búsqueda de los sospechosos.
La persecución de los implicados fue positiva y en concreto la
pandilla fue interceptada en la urbanización de Son Fiol, merced a
la descripción física facilitada por un testigo de uno de ellos.
Segundo P.M., de 24 años de edad, presentaba signos de cojera,
debido al accidente sufrido, y junto a él fueron arrestados Jorge
I.C., de 19, Sebastián M.S., de 18, y el mentado menor, de 14. Sus
compañeros declararon que era el adolescente, que carece de carnet,
dada su edad, el que conducía el Fiat Uno.
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