La tragedia, en forma de trailer, estuvo rondando ayer en la
urbanización Nova Santa Ponça. El remolque había sido dejado
estacionado en lo alto de la calle Bélgica. Por causas que se
desconocen de manera oficial, a la hora citada comenzó un descenso
descontrolado, calle abajo, hasta empotrarse contra la fachada de
una vivienda unifamiliar a la que le estaban dando los últimos
toques antes de entregarla a los propietarios.
En aquellos momentos había varias personas en la zona, y en la
vivienda unifamiliar una brigada de obreros estaba trabajando. El
primero en detectar el peligro fue un conductor que, al ver el
trailer descender calle abajo, comenzó a hacer sonar el claxon de
su coche. Por fortuna no hubo que lamentar ningún herido y todo
quedó en un susto. Un susto y cuantiosos daños materiales. El
trailer fue cogiendo fuerza en su descenso por la calle Bélgica e
impactó contra el chalet, en la calle Pío Baroja. El remolque
destrozó la verja de acceso a la propiedad, parte de un muro y el
porche. Después quedó suspendido unos dos metros del suelo.
El ruido fue atronador y el susto mayúsculo. De inmediato se
requirió la presencia de la Policía Local y una patrulla se
desplazó al lugar del accidente. Tras certificar que no había
ninguna persona herida los agentes iniciaron las gestiones para
esclarecer lo ocurrido. El remolque es propiedad de la empresa
TransMallorca y un operario lo había dejado en la citada calle. La
distancia entre el lugar donde estaba estacionado el trailer y la
vivienda unifamiliar es de 110 metros.
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