P. Matas24/08/01 0:00
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La informática le ha jugado una mala pasada a Jaime Cánaves, el vecino de Manacor que el pasado seis de julio se llevó a su hija sin la autorización de los abuelos maternos, que tienen la guarda y custodia de la menor. Desde que la abogada Maria Durán formuló la denuncia en contra de Jaime Cánaves, como sospechoso del delito de 'secuestro parental', la Guardia Civil difundió las fotografías del padre y su hija a través del correo electrónico, a todas las comandancias y puestos del Cuerpo en el país.

Ayer, los agentes del puesto de una ciudad de la provincia de Teruel confirmaron sus sospechas, al comprobar que el hombre y la niña que habían visto eran los que aparecían en las fotos. Jaime Cánaves fue detenido y se informó de inmediato a la juez de Manacor que lleva el caso. Se pone así punto y final a una historia que ha tenido una duración de un mes y medio y que, según han manifestado tanto los abuelos maternos como la abogada de la familia 'no es la primera vez que se produce'.

La autoridad judicial concedió hace unos meses la guarda y custodia y la Patria Potestad de la niña a los abuelos maternos. La madre de Marina fue hallada sin vida el 19 de febrero de 1998. Había estado casada con Jaime Cánaves y hacía poco tiempo que había formalizado la separación. Después de la muerte el padre se hizo cargo de la niña, pero el hecho de que poco tiempo después la dejara en casa de unos amigos, además de otras circunstancias, hizo que los abuelos maternos llevaran el caso a los juzgados. Desde que el fallo fue definitivo a favor de los abuelos, el padre tenía derecho a estar con la niña unas horas entre semana y fines de semana alternativos.