La víctima apareció días después del crimen en un sembrado de Manacor.

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«Para nosotros está muy claro que fueron cuatro personas colombianas las que mataron a Andrés cuando dormía en su casa y luego lo trasladaron hasta el descampado de sa Rotana». La familia de Andrés Moyá Bueno, el hombre que fue asesinado en junio en Manacor, ha roto su silencio y en declaraciones a Ultima Hora ha asegurado que el albañil de 34 años fue víctima de un ajuste de cuentas tras un viaje a Colombia en el que trajo, oculto en su cuerpo, un alijo de cocaína. Juan José Moyá explicó que su hermano era natural de Tarazona de la Mancha, en Albacete, y ya de joven tuvo algunos problemas con la droga.

Luego se vio inmerso en el asalto a una joyería y en 1994 se trasladó a Mallorca, donde ya residía su hermana. «Tenía malas amistades y con mi coche, un día, robaron en una gasolinera. Los cogieron y como mi hermano tenía antecedentes se pasó un año y medio en la cárcel», contó. Otro punto que la familia de Andrés quiso dejar claro fue el de los supuestos malos tratos a su compañera sentimental, con la que tuvo una hija que ahora tiene cinco años: «Es falso que la maltratara, lo que pasa es que ella era muy ambiciosa y dominante y le hacía la vida imposible».

Andrés se separó de su novia y siguió viviendo en la casa de la calle Barracal de Manacor. Poco antes de su muerte llegaron nuevos inquilinos a la vivienda: un amigo colombiano, sus padres y una hermana, todos de esa nacionalidad. La familia de Andrés relaciona directamente a esos cuatro extranjeros -que en la actualidad están en paradero desconocido- con el fatal desenlace. «Mi hermano hizo un viaje a Colombia y trajo droga. Pensamos que a raíz de ese viaje surgieron problemas y que hubo discusiones. A Andrés lo mataron cuando estaba durmiendo en su cama, desnudo. Creemos que le inyectaron cocaína en distintas partes del cuerpo y le ocasionaron una sobredosis. Debieron llevarlo en coche hasta el Camí de sa Rotana, pero lo vistieron a toda prisa y eso se nota porque tenía los calzoncillos al revés», apuntó.