Acudieron a la reunión representantes políticos y policiales. Foto: PERE BOTA.

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El alcalde de Palma, Joan Fageda, convocó ayer una reunión extraordinaria de la Junta Local de Seguretat Ciutadana para analizar el informe realizado sobre esta materia a finales del pasado verano por él mismo. A la reunión asistieron, entre otros, el presidente del Govern, Francesc Antich; el conseller de Interior, Josep Maria Costa; la delegada del Gobierno, Catalina Cirer; el teniente de alcalde de Governació i Funció Pública, José Manuel Sierra; el presidente del Tribunal Superior de Justícia de Balears, Àngel Reigosa; el fiscal jefe de Balears, Antonio de Vicente Tutor; el juez decano de Palma, Pere Barceló; y el jefe de la Policia Local, Joan Mut.

«Queremos aprovechar la modificación de la Ley de Enjuiciamiento Criminal del Gobierno central para hacerle llegar nuestras aportaciones. El documento que estamos consensuando también lo enviaremos a la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) para que lo estudie», destacó Fageda, y señaló que, según un informe de la Guardia Civil, el 60% de los delitos en Balears son cometidos por personas de nacionalidad extranjera.

Entre las propuestas de actuación que propone el informe se encuentran la regulación de la prostitución, en especial en la calle, en sus aspectos sociales, sanitarios y fiscales; facultar a los jueces para que puedan expulsar a los extranjeros delincuentes reincidentes; reforzar el número de fiscales en Balears; implantar el juez de maza; optimizar las medidas de protección del menor y conseguir que la reiteración de faltas pueda ser considerada como delito. «Los delitos menores crean sensación de inseguridad», añadió Fageda, e indicó que en el último mes han sido expulsados 14 extranjeros que habían delinquido.

Sierra recordó, por su parte, que el Govern tiene elaborado un anteproyecto de ley que regula el consumo de bebidas alcohólicas en la vía pública. «Ayudaría a mejorar el problema del alcohol en la Platja de Palma», dijo. Fageda señaló que «hay que implicar a los empresarios turísticos en la búsqueda de una solución al problema de la seguridad ciudadana. Necesitamos su colaboración», dijo, y mostró su preocupación al señalar que «parece que los touroperadores están pidiendo una rebaja de precios y esto puede producir una bajada de la calidad», resumió.