El estado de la mar no era preocupante, aunque había vientos de fuerza 5 ó 6. Desde entonces la familia del pescador no tiene más noticias suyas y ayer se puso en marcha un enorme operativo de búsqueda en el que participaron un helicóptero de Salvamento Marítimo, la embarcación «Castillo de Bellver», un avión, un aviocar del Ejército del Aire y un remolcador, que de noche pudo continuar 'peinando' una amplia zona.
Las fuentes consultadas explicaron que el padre del desaparecido, que también posee un barco, se sumó a la búsqueda «aunque el hombre se ha centrado en una zona más cercana a la isla de Eivissa para no coincidir con nuestros efectivos y rastrear la misma zona dos veces». «La Pandora» es una potente embarcación de color blanco con una banda azul y según parece el tripulante salía a menudo a pescar con ella. De hecho, es un gran conocedor del mar y un experto pescador. Salvamento Marítimo y el SAR barajan varias hipótesis, desde que la nave haya quedado a la deriva por un fallo en el motor o hasta que haya zozobrado, aunque son optimistas y esperan encontrar al pescador en perfecto estado y con prontitud.
El desaparecido tenía previsto cenar con su familia la noche de Fin de Año y aunque no llevaba emisora en la motora si se llevó su teléfono móvil. A lo largo del día de ayer los efectivos de rescate trataron infructuosamente de ponerse en contacto con él, pero en todas las ocasiones el aparato se encontraba fuera de cobertura. Para el día de hoy está previsto que los mismos medios aéreos y marítimos salgan de nuevo en busca del joven, en una zona cercana a la que 'peinaron' ayer, en el sur de Cabrera. Mientras tanto, sus allegados están pasando el peor comienzo del año que podían imaginar.
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