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JUAN MIGUEL LÓPEZ La Sección Segunda de la Audiencia de Palma dejó ayer visto para sentencia un juicio a un ciudadano magrebí que hizo perder un ojo a su mujer de un puñetazo. El Ministerio Fiscal ha pedido para el agresor, Mohamed H., que está acusado de lesionar intencionadamente a su mujer, una pena de seis años de prisión. Por su parte, la abogada de la defensa pide una pena menor, ya que considera que el acusado cometió un delito de lesiones por imprudencia.

Los hechos sucedieron el 6 de enero de 2000. La pareja que convive con una hija de ambos, de seis años, y con una hija de la mujer, de 22 años, se encontraba en el domicilio familiar en la calle Rubén Darío de Palma. Después de una discusión por una abrigo que el acusado pretendía buscar en un armario, el agresor acaba lanzando un puñetazo a su esposa que acaba con la pérdida del ojo.

Según declaró la víctima en el juicio, ésta sufría desde hacía unos años una serie de enfermedades en su ojo que habían provocado dos intervenciones quirúrgicas en su cornea. Una circunstancia que el marido conocía. A pesar de ello, el agresor lanzó el fuerte golpe en el ojo enfermo de la víctima, lo que provocó la pérdida del ojo, según corroboraron ayer en el juicio los médicos forenses.

Tras la agresión, el acusado acompañó a la víctima a una clínica de Palma para que fuera atendida de inmediato, según reconocieron tanto agresor como víctima. Posteriormente, y ante la necesidad de un tratamiento más específico, la pareja se marchó a Barcelona para continuarlo. Los gastos fueron pagados en común por el matrimonio, ya que la pareja, a pesar de la agresión no ha tenido hasta el momento del juicio la intención de separase. Dicha circunstancia ha sido considerada por el fiscal como una atenuante que reduce la pena de prisión. La mujer, sin embargo, reclama una indemnización al marido y se plantea ahora la separación.