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AGENCIAS-BERLIN
La toma de rehenes que tuvo lugar ayer por la mañana en un autobús de la compañía de transportes públicos de Berlín concluyó a las 14.30 horas tras un asalto de la policía, en el que el secuestrador resultó herido mientras que los rehenes se encuentran sanos y salvos, según anunció la policía alemana.

El secuestrador, herido en circunstancias todavía no esclarecidas, fue traslado esposado, según explicaron testigos presenciales de los hechos. Varios agentes irrumpieron por las ventanillas del autobús, cuatro horas y media después del secuestro por un hombre que acababa de atracar un banco. «El asalto sólo duró unos segundos», tras un intercambio de disparos, precisó la policía.

El secuestrador había atracado horas antes una sucursal del Commerzbank, el cuarto banco comercial alemán, en el barrio de Steglitz, al sur de la capital, en compañía de un cómplice. El director regional del banco, Ewald Nehrbass, declaró que nadie resultó herido en el incidente.

Mientras que uno de los atracadores huía, el otro subió en un autobús de línea, y tomó como rehenes a unos 20 pasajeros que se encontraban a bordo. El autobús recorrió varias calles de Berlín durante una hora, antes de que la policía consiguiera rodearlo y bloquearlo en el barrio de Schoeneberg, en el centro de Berlín occidental, precisaron las fuentes policiales consultadas.

Casi todos los pasajeros fueron liberados rápidamente, y a bordo sólo quedaron el secuestrador, un hombre y una mujer policía.