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EFE-ANKARA
Diez estudiantes murieron ayer y otras trece personas resultaron heridas, al derrumbarse una escuela de enseñanza religiosa en el centro de Turquía, causado por una fuerte explosión en el edificio. El accidente ocurrió de madrugada en la ciudad de Kayseri, en la provincia central de Anatolia, cuando el edificio de dos plantas de la escuela, dedicada a la enseñanza del Corán, libro sagrado de los musulmanes, se derrumbó.

En ese momento, había en los dormitorios de la escuela unas 23 personas, entre estudiantes y profesores. Según el alcalde de Kayseri, Mehmet Ozhaseki, el accidente se produjo a las 00.30 GMT tras una fuerte explosión que se escuchó a unos cinco kilómetros de distancia del lugar donde está la escuela.

Los equipos de la Defensa Civil llegaron al lugar y rescataron con vida a trece personas y recuperaron los cadáveres de los diez fallecidos, antes de anunciar el fin de la búsqueda este mediodía. El Gobernador de Kayseri, Nihat Canpolat, confirmó que la explosión de una bombona de gas fue el causante del derrumbe del edificio. «Desafortunadamente, han muerto diez estudiantes, y el estado de dos de los trece heridos es grave», añadió Canpolat, mientras recibía a los diputados en el Parlamento del gobernante Partido de la Justicia y el Desarrollo (PJD), de tendencia islámica, que llegaron al lugar del incidente.