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EFE-CIUDAD REAL
Los trabajadores de las sesenta empresas subcontratadas por Repsol YPF de Puertollano acordaron, tras una concentración espontánea de más de mil personas, efectuar un paro de tres días para pedir mayores medidas de seguridad y como muestra de dolor por las víctimas de la explosión del jueves, que causó la muerte a seis trabajadores y quemaduras muy graves a otros cuatro.

Antes de las ocho de la mañana se fueron congregando, sin convocatoria previa, los trabajadores de las contratas en la puerta número 9 del complejo fabril, por donde acceden los empleados que no son de la plantilla de Repsol. Ante la diversidad de propuestas de los congregados para mostrar su «rabia y dolor» por lo sucedido, una representación de las empresas contratistas se reunió y decidió emprender una marcha a pie desde la puerta número 9 a la principal (la número 1), distantes unos dos kilómetros, informaron representantes de estas empresas, quienes rehusaron identificarse por temor a represalias laborales. Otra de las medidas adoptadas fue la de convocar tres jornadas de luto durante las cuales no acudirán a sus puestos de trabajo.