A las 23.15 horas, aproximadamente, un vehículo de la marca
Smart, de pequeño tamaño, tomó una curva a gran velocidad a la
salida del aeropuerto, en dirección a Palma. Se trata de una
bifurcación donde se puede tomar la dirección hacia Llucmajor y
s'Aranjassa o, también, introducirse en la autopsia dirección a la
capital balear. El turismo no pudo coger ningún sentido porque se
subió al guarraíl y salió despedido contra unos arbustos, volcando
a continuación.
Cuando la Guardia Civil y la Policía Local tuvieron conocimiento
del accidente enviaron a varias patrullas hasta la salida del
aeropuerto, pero se encontraron con la sorpresa de que el coche
estaba vacío. A consecuencia de la colisión quedó completamente
destrozado y los funcionarios, utilizando linternas, escudriñaron
los alrededores ante el temor de que el conductor hubiese salido
despedido y estuviera malherido. Tras veinte minutos de búsqueda,
se descartó esta posibilidad. Sobre el Smart no pesaba ninguna
denuncia por robo, por lo que tampoco parece probable que el piloto
se diera a la fuga porque se trataba de un coche sustraído.
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