El caballo de una galera se desbocó ayer por el casco antiguo de
Palma, sin provocar heridos. El suceso ocurrió alrededor de las
diez y media de la mañana, cuando la galera número 38 se encontraba
en la Plaça de Santa Eulàlia. El conductor perdió el equilibrio,
cayó al suelo y el caballó se desbocó por la calle Morey, en
dirección a la catedral.
En la esquina entre las calles Sant Pere Nolasc y Miramar, el
animal resbaló ya que el pavimento estaba mojado y se empotró
contra la puerta de entrada de una vivienda. Por esta zona había
decenas de turistas paseando, aunque ninguno de ellos sufrió
lesiones.
En un primer momento, desde la Policía Local de Palma se
solicitó la presencia de los bomberos y de un veterinario ya que se
había indicado que el caballo estaba malherido porque le había
caído encima la galera. No obstante, entre los agentes y varios
conductores de galeras lograron desenganchar al animal y
trasladarlo a una zona más tranquila para devolvérselo
posteriormente a su propietario. Los agentes cogieron los datos del
conductor que sufrió el percance y elaboraron el correspondiente
informe.
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