Las víctimas eran asaltadas en la plaza Mediterráneo junto a las escaleras que bajan al Marítim.Foto: J.M.

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Una banda compuesta por 20 menores, de edades comprendidas entre los 15 y 17 años, ha sido desarticulada por funcionarios de la comisaría oeste-uno del Cuerpo Nacional de Policía (CNP). A todos los integrantes se les acusa de haber cometido numerosos robos con violencia e intimidación, la mayoría de ocasiones en las escaleras que unen la plaza Mediterráneo con el Passeig Marítim. Hasta el momento han sido detenidos seis jóvenes integrantes de la banda, que han sido puestos a disposición del Fiscal de Menores. También están identificados otros catorce menores, los cuales están siendo buscados para la instrucción de diligencias.

Los robos con intimidación eran cometidos por la banda desarticulada durante las horas de madrugada en zonas de ocio, sobre todo los fines de semana y festivos. Todas las víctima eran abordadas por los implicados, siendo amenazadas con darles una paliza e incluso «pincharles» con navajas, al propio tiempo que les arrebataban todos los objetos de valor que portaban, dinero en metálico, teléfonos móviles, joyas, relojes y otros efectos.

Emodus operandi con el que actuaba la banda juvenil era el siguiente: un grupo de ellos se apostaba en los aledaños de la plaza Mediterráneo para abordar a las víctimas, mientras otro grupo esperaba al pie de las escaleras que conducen al Passeig Marítim. De esta manera, era imposible que los jóvenes asaltados pudieran burlar a los agresores.

Hasta el momento han sido esclarecidos más de doce delitos de robo cometidos en dicho lugar, siendo identificados por las sucesivas víctimas un total de 20 jóvenes. De ellos, han sido detenidos seis y los catorce restantes están siendo buscados por los agentes para responder de los cargos que se les imputan.

Todas las víctimas que denunciaron los hechos señalaron la impotencia que tuvieron ante el trato humillante y vejatorio a que fueron sometidas por los autores de estos hechos, siendo agredidos y maltratados así como desposeídos de todas sus pertenencias ante las amenazas de muerte sufridas.