Una atracción mecánica se rompió poco después del mediodía de ayer
y causó 18 heridos, 15 de ellos niños y dos de ellos muy graves. La
atracción tenía los permisos en regla y fue construida en 2001,
según aseguró Justo Padilla, alcalde de Guillena, en cuyo parque
«Zoopark» se registró el siniestro.
Sobre las doce y media la mayor de las cinco atracciones
mecánicas de este parque, denominada «Voladora», un tiovivo de
cadenas que se va elevando a medida que cobra velocidad en sus
vueltas, se quebró, según testigos presenciales, «como si se
hubiera roto el eje».
La estructura de la atracción, partida en dos, cayó aplastando a
los usuarios, quince niños de entre 8 y 11 años y tres adultos.
Al lugar del siniestro se trasladó el helicóptero del Servicio
de Emergencias 061, que llevó al Hospital Virgen del Rocío a los
dos niños más graves, ambos con traumatismos craneoencefálicos y
uno, además, con una pierna rota.
La «Voladora» consiste en un tiovivo que se eleva hasta los doce
metros de altura con un mecanismo hidráulico dejando a los usuarios
sujetos por la cintura y con los pies suspendidos.
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