TW
0

JAVIER JIMÉNEZ/MICHELS
Vestidos de negro, encapuchados, con guantes, fuertemente armados y con aspecto siniestro la banda que está cometiendo numerosos asaltos en Palma y Calvià repitió en la noche del jueves, esta vez en un lujoso chalet de Costa den Blanes.

A las 21.00 horas, aproximadamente, un matrimonio de mediana edad abrió la puerta de su casa, después de que hubieran llamado a la puerta. De repente, se encontraron con tres figuras de negro, dos hombres y una mujer. La señora recibió un empujón y en pocos segundos los desconocidos entraron en la vivienda y la encañonaron. Cuando le pidieron al varón que abriera la caja fuerte saltó la alarma y los intrusos, sorprendidos por aquel imprevisto, salieron corriendo. La Policía Local de Calvià y la Guardia Civil de Palmanova y Palma montaron un dispositivo impresionante: montaron controles en los accesos a la autopista, en rotondas y en carreteras secundarias. También dieron amplias batidas por zonas de bosque de Costa den Blanes. Los ladridos de unos perros en una finca próxima hicieron pensar a los agentes que la banda se había refugiado en aquel paraje, pero tras 'peinar' cada palmo de terreno no se halló ni rastro de los fugitivos.

La preocupación en las fuerzas de seguridad es evidente, sobre todo porque la banda actúa con demasiada frecuencia y cambia los escenarios de forma continua. Hace una semana, aunque no ha trascendió hasta ayer, tres encapuchados asaltaron un chalet de Bendinat, armados con una escopeta de cañones recortados. Saltó la alarma y también escaparon apresuradamente. Pero no todos sus golpes han fracasado. Hace algunos días entraron en un hotel de Porto Pí y tras encañonar al conserje de noche se hicieron con una suma de dinero en efectivo. Horas antes habían seguido a un empresario hasta un párking de la calle Joan Maragall. El hombre había cerrado su restaurante y llevaba casi 3.000 euros en efectivo encima. Uno le apuntó con una pistola y otro lo sacó violentamente de su furgoneta. Luego lo desvalijaron.

En la investigación para detener a esta banda colaboran la Guardia Civil y el Cuerpo Nacional de Policía, y han participado puntualmente las policías locales de Calvià y de Palma. Los hampones actúan con violencia y lo que más preocupa es que van fuertemente armados. La escopeta recortada la llevan cargada y no es una réplica. Los dos varones son corpulentos y miden cerca de 1,80 centímetros, mientras que la mujer también es atlética y de estatura considerable. Los tres podrían ser españoles.