El acusado del doble crimen del puente de la vía de cintura fue trasladado ayer a los juzgados de Vía Alemania. Foto: ALEJANDRO SEPÚLVEDA

TW
0

Vestido con una camiseta de manga corta con el escudo del Mallorca que le venía demasiado grande, chancletas, barba de varios días y muy delgado, Jacinto G.M. ingresó en prisión por orden del juez de guardia como sospechoso del doble crimen de dos mendigos. El pasado domingo, los cuerpos de las víctimas fueron descubiertas por un conductor bajo un puente de la vía de cintura de Palma. Ambos presentaban numerosos golpes en la cabeza asestados con un objeto contundente. Desde el primer momento, las investigaciones policiales se encaminaron a los ambientes marginales en los que se movían los dos fallecidos, Santiago González y Angela Uguet. Ese mismo día por la noche, la policía detuvo a Jacinto G.M. como sospechoso del doble crimen. El detenido conocía a la pareja y ejerce ocasionalmente de albañil, por lo que en su mochila siempre lleva un martillo, una herramienta que la policía cree que podría ser el arma homicida.

En una primera declaración ante la policía, Jacinto G.M. reconoció parcialmente los hechos. Ayer, durante más de una hora, con algunas dificultades para hablar debido a su adicción a las drogas y fuertemente medicado, aseguró ante el juez de Instrucción 1 que no recordaba nada. No obstante, cuando la policía le mostraba las fotos de la escena del crimen decía tener «flashes» y afirmaba que no era la primera vez que veía esa escena.

El sospechoso dijo que no se podía explicar lo sucedido, entre otras cosas porque ese mismo día había consumido alcohol, y entre 1,5 y 2 gramos de cocaína inyectada en sangre.

En cuanto al paradero del martillo que guarda habitualmente en su mochila, indicó que no sabe «dónde lo había dejado perdido». En este sentido, la policía sigue buscando el arma homicida en las inmediaciones de la vía de cintura donde tuvo lugar el crimen, un lugar situado a escasos de 50 metros del centro de acogida de Es Refugi, en el que solían dormir las víctimas.