Su única motivación fue divertirse. Y aún así la transgresión les
saldrá cara. La Policía Local de Sineu ha esclarecido el ataque con
'graffitis' al «Pou Llevoner», un emblemático monumento del siglo
XVI. Los autores fueron tres niños de trece años que han reconocido
la gamberrada y que ahora deberán realizar trabajos sociales para
redimirse. Sus padres se han comprometido a pagar el importe de los
desperfectos.
El primer domingo del mes, tal y como informamos, unos
desconocidos amparados en la oscuridad se ensañaron con el pozo,
que había sido restaurado tras un largo período de abandono. El
monumento está emplazado junto a la vía de circunvalación, entre
carreteras de Petra y Sant Joan. Por la mañana los vecinos
descubrieron, indignados, el acto vandálico. La Policía Local puso
en marcha una investigación y confirmó que las mismas personas que
habían pintado el pozo también habían dejado su sello en otros
'graffitis' que habían aparecido en la localidad. Se trataba de
inscripciones independentistas, dibujos y firmas. La lista de
sospechosos se fue acotando y tras muchas gestiones se consiguió
identificar a los tres 'bromistas'; todos ellos de trece años de
edad y vecinos del pueblo. Los zagales, uno a uno, fueron
reconociendo el ataque al «Pou Llevoner» y sus padres fueron
puestos al corriente de la situación. La reacción de las familias
fue muy positiva y se comprometieron, sin reservas, a pagar los
daños causados por los chavales. La Fiscalía de Menores ha sido
informada de los resultados de la investigación y es muy probable
que los tres imputados tengan que realizar trabajos sociales.
En otro orden de cosas, hace unos días se llevó a cabo en Sineu
una Junta de Seguridad a la que acudió el alcalde, la Guardia
Civil, Policía Local, representantes de la APA, el director del
instituto y un vocal del colegio. Se acordó que los agentes vigilen
los centros docentes para evitar el consumo de drogas.
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