Un padre y sus tres hijas adolescentes murieron ayer a causa de un deslizamiento de tierra que sepultó su casa en la isla de Ischia, a pocos kilómetros de la costa de Nápoles.
El suceso tuvo lugar a primera hora de la mañana, cuando parte de la falda de una colina de la localidad de Pilastri, en Ischia, se desprendió y enterró una casa en la que residían un matrimonio con sus tres hijas y una sobrina de 3 años.
Los bomberos lograron rescatar con vida a la madre, Orsola Migliaccio, de 40 años, y a su sobrina, que resultó ilesa, pero el resto de la familia murió a causa del desprendimiento.
Los fallecidos son Luigi Buono, de 53 años, cocinero de un restaurante del puerto de Ischia; y sus hijas Anna, de 18 años; María, de 16, y Giulia, de 12.
La masa de tierra y piedras que se desprendió de la colina afectó también a otras viviendas de la zona, pero en menor medida, con el resultado de algunos heridos leves que fueron atendidos en un hospital cercano.
El asesor regional de Protección Civil, Luigi Nocera, precisó que el deslizamiento principal alcanzó en menor medida a otras dos viviendas, mientras que posteriormente «se verificaron otros desprendimientos, presumiblemente tres o cuatro, que afectaron también a los equipos de rescate, afortunadamente sin víctimas».
El suceso se produjo después de que el sábado, la isla de Ischia sufriera un fuerte temporal de lluvia, que continuaba en la jornada de ayer. Ante el peligro de nuevos desprendimientos, medio centenar de familias fueron evacuadas de la zona.
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