La zanja mide dos metros de largo por 1,5 de ancho. Foto: GUILLEM MAS

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GUILLEM MAS
Una 'broma' o gamberrada de muy mal gusto pudo acabar con consecuencias graves. Los hechos se iniciaron la madrugada de ayer en la carretera de Sant Joan a Sineu, una carretera en obras pero por la que circulan algunos conductores. De madrugada, una o varias personas robaron una gran retroexcavadora que había en un punto donde se ejecutan las obras de ampliación.

Después, con la máquina se abrió una gran zanja, de parte a parte de la carretera, de dos metros de largo por 1,5 de ancho. Acto seguido se colocó de nuevo la retroexcavadora en su sitio de orígen y el que la había utilizado abandonó el lugar en un turismo. Sobre las siete de la mañana un turismo que provenía de Sant Joan circulaba por el citado tramo, y debido a la intensa niebla el conductor no vio los montones de tierra ni, por supuesto, la gran zanja.

Así que continuó circulando y cayó en el enorme agujero. Por fortuna el hombre no sufrió lesiones importantes y sólo hubo que lamentar daños en la carrocería. Minutos después una furgoneta, que circulaba en el mismo sentido que el coche, estuvo a punto de correr la misma desgracia. Pero en esta ocasión el conductor reaccionó y se detuvo al chocar contra los montones de tierra. La Policía Judicial de la Guardia Civil investiga el caso y agentes de la Agrupación de Tráfico se desplazaron también al lugar dónde ocurrieron los hechos.