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Un ciudadano polaco de 45 años aceptó ayer una pena de cinco años y medio de cárcel por haber violado a su vecina en Can Pastilla, el pasado 29 de enero.

Ese día, sobre las 19.45 horas, el procesado, cuya identidad es Krzysztof Tryka, fue a buscar a su vecina a su domicilio y la invitó a que subiera al suyo, con la excusa de tomar un café y de que sus amigos estaban viendo el fútbol allí.

La víctima aceptó la invitación, pero cuando llegó a casa del procesado y vio que no había nadie intentó marcharse. En ese momento, Krzysztof Tryka la cogió con fuerza de un brazo, la tiró al suelo, le quitó la parte de abajo del chándal que portaba, así como la ropa interior, y se tiró encima de ella.

La víctima logró zafarse de él y pidió auxilio, pero el polaco la cogió de nuevo por los brazos, la llevó por la fuerza al dormitorio y la violó.

La mujer logró escapar y posteriormente denunció los hechos. El sospechoso fue detenido y el juez de guardia ordenó su ingreso en prisión.

Ayer estaba señalado el juicio en su contra en la Sección Primera de la Audiencia Provincial de Palma. Inicialmente, la fiscal solicitaba nueve años de prisión, aunque rebajó la pena a cinco años y medio, aceptada por el acusado, quien declaró ante el tribunal que estaba «muy arrepentido» de lo que había pasado. También explicó que a principios de año tenía muchos problemas con el alcohol y el día que ocurrió la violación iba borracho y no recordaba los hechos. En cualquier caso, el ciudadano polaco se declaró culpable y volvió reiterar que «estaba muy arrepentido» de haber agredido sexualmente a su vecina.