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GABRIEL ALOMAR
La bahía de Pollença fue escenario ayer del ejercicio «Balsar 1-07» de adiestramiento avanzado, cuya finalidad consiste en evaluar la actuación de los medios participantes, de orden terrestre, naval y aéreo, así como su capacidad de reacción ante una operación de búsqueda y salvamento en el mar.

En este momento despegan en misión de búsqueda un helicóptero Sikorsky HE-24 perteneciente al Ala -78 con base en Granada; un avión Aviocar D3B junto a un helicóptero Puma HD-19 del 801 Escuadrón de las Fuerzas Aéreas, con base en Palma, y un avión aviocar D3 B del 803 Escuadrón con base en Madrid. Coordinados por los centros de rescate de Palma, Barcelona, Cruz Roja en Palma y Policía Local de Pollença, cuentan con el apoyo naval de una embarcación de la Sociedad de Salvamento y Seguridad Marítima y otras dos del Ejército del Aire.

A última hora de la mañana dio comienzo el simulacro: Dos aeronaves (un avión Boeing 737 y una avioneta Pilatus PC 9) han colisionado en el aire sobre el mar, entre Mallorca y Menorca, siniestro que ha motivado el despliegue de todos los medios para la búsqueda y rescate de los supervivientes.

Al poco rato se localiza al primer grupo de supervivientes por «homing» (localización por radio de la baliza de emergencia del avión). A continuación, la aeronave lanza las cadenas (conjuntos de balsas y kits de supervivencia marítima). Los heridos con diversos politraumatismos son seleccionados según su gravedad e izados a los helicópteros mediante camillas, cinchos o cestas según los casos. Seguidamente da comienzo el despegue, localización y rescate del segundo grupo de supervivientes, mientras los helicópteros con los rescatadores, mediante grúas colaboran con la operación.