La policía llevó a cabo un gran despliegue en Palma y Calvià para detener a los 'matones'.

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E.LÓPEZ VERDÚ/G.PICÓ
El afectado explicó que formaba sociedad con otras dos personas para explotar el negocio. Hace poco comenzó a recibir amenazas muy graves para que comprase la parte del restaurante que no le pertenecía a un precio muy alto, pero él se negó. La policía inició las investigaciones, aunque hace escasos días las gestiones se aceleraron de forma inesperada, al descubrirse que varios «matones» habían sido contratados y tenían que llegar a Mallorca de manera inminente para terminar la «operación de venta» del negocio.

También se descubrió que más empresarios estaban siendo extorsionados, aunque no se atrevían a denunciar por temor a graves represalias. Se sospecha que algunos de ellos han podido llegar a pagar hasta 16.000 euros. Ante esta novedad, la policía puso a trabajar con la máxima urgencia a un equipo multidisciplinar.

La intención era detener a los «matones» antes de que llegasen a cumplir sus graves amenazas. Así, se movilizaron el Grupo de Atracos, el Grupo de Robos y varios funcionarios de la Brigada provincial de Extranjería y Documentación. Las intensas gestiones dieron sus frutos a lo largo de la noche del jueves, cuando los agentes lograron detener en Palma y Calvià a X.L.C., de 46 años, G.Z.W., de 45 años, y T.F.H.C., un español de origen chino de 50 años de edad.