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JAVIER JIMÉNEZ
Los cinco rumanos detenidos por la Guardia Civil acusados de robar en tiendas de Mallorca centraban su actividad delictiva en la zona de Palma, Artà y Marratxí, según informó ayer la Oficina Periférica de Comunicación (OPC) de la Comandancia palmesana.

Todo aquel material había sido sustraído, pero es una mínima parte en relación al conjunto que la Benemérita piensan que han robado. Esos artículos fueron enviados por correo a Italia y Rumanía. Los detenidos son: Vasile A.M., de 25 años; Dorin C., de 26; Georgian P., de 24; Mihai N., de 27 y Violeta E.M., de 23. Todos ellos han sido puestos en libertad tras prestar declaración en un juzgado de Palma.

La banda fue desarticulada el pasado día 7, tal y como adelantó en su edición de ayer Ultima Hora, y de momento ya se han esclarecido un total de doce robos. La Policía Judicial registró el piso que habían alquilado los extranjeros, en una céntrica calle palmesana, y encontró perfumes, ropa, teléfonos móviles, licores y relojes de las mejores marcas.

Por otra parte, en la zona Norte de Mallorca, en concreto en Alcúdia, Pollença y Can Picafort, las fuerzas de seguridad han detectado un aumento de los hurtos al descuido en restaurantes. El método empleada es casi siempre el mismo. Un grupo de tres rumanos pide una mesa en un local atestado de clientes y uno de ellos, disimuladamente, se dedica a meter la mano en bolsos cercanos en busca de las carteras. Cuando la banda ha conseguido algunas, los tres sospechosos se levantan y justifican su partida precipitada diciendo que esperaban a unos amigos que no se han presentado. Es después cuando los comensales comienzan a descubrir lo que ha pasado. El modus operandi se ha repetido al menos en cinco ocasiones.