Un escocés de 17 años tuvo una peculiar forma de celebrar su mayoría de edad: apuñalar al vigilante del hotel de Punta Ballena donde se alojaba con sus amigos. La Guardia Civil ha detenido al agresor y la víctima tuvo que ser intervenida en Son Dureta, aunque no se teme por su vida.
El menor había llegado a Mallorca en compañía de otros jóvenes británicos y según parece se pasó varios días durmiendo por la mañana y bebiendo alcohol entre la tarde y la madrugada.
La noche de su fiesta de cumpleaños se encontraba completamente bebido y en la habitación el ruido era ensordecedor. Algunos clientes parece ser que se quejaron del estruendo y un vigilante acudió a la habitación y llamó a la puerta. El adolescente escocés estaba muy excitado y discutió con el empleado, que le pidió que se tranquilizaran y dejaran de hacer ruido. Su nerviosismo fue en aumento y de repente sacó una navaja y se la clavó a la altura del abdomen. Un testigo presenció el ataque y el británico no tuvo oportunidad de huir del hotel. La Guardia Civil se desplegó rápidamente y procedió a su detención, por un delito de intento de homicidio. El herido, por su parte, fue trasladado hasta el hospital de Son Dureta, con una herida incisa considerable por la que manaba abundante sangre. Los médicos le intervenieron de urgencia y comprobaron que la puñalada no le había afectado ningún órgano vital. El trabajador llegó al centro hospitalario consciente y su evolución es positiva. El escocés detenido será interrogado por los agentes de la Guardia Civil en breve y luego será puesto a disposición judicial, en Palma.
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