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JULIO BASTIDA Alfonso García, 'El Raspas' tiene a la Policía Local de Palma a su entera disposición las 24 horas del día. Así se deduce de la versión oficial remitida en el día de ayer por el departamento de prensa del área de Benestar Socials de l'Ajuntament de Palma.

«La asistenta social de Cort, puso en marcha el correspondiente expediente de incapacidad judicial hace unos meses con la finalidad de que un juez autorice la internación en el centro de Aldaba (sociedad que tutela a personas que están en la indigencia)», añaden las fuentes oficiales.

Los responsables municipales puntualizan: «Nosotros hemos comprobado las circunstancias en las que vive Alfonso y sus facultades mentales son correctas, por consiguiente entendemos que puede vivir en la indigencia y ejercer su derecho de ser una persona libre. Cuando el juez dictamine que se debe ejecutar la sentencia firme de incapacidad judicial nosotros lo llevaremos al centro, pero si 'el Raspas' no quiere estar allí nosotros no podemos hacer nada», finalizó el portavoz municipal.

Los vecinos no han tardado en reaccionar y consideran que «llevamos más de un año con esta situación y ahora nos enteramos que la asistenta social tardó meses y más meses en estudiar el expediente, realizar la valoración y remitir el caso al juez. Esto sólo pasa en Mallorca».

Una de las particularidades de esta compleja situación la protagoniza el departamento de Benestar Social de Cort al afirmar que: «Mientras que el juez no envíe la sentencia firma desde el Ajuntament enviaremos a la policía, no de una manera represiva, sino todo lo contrario, de una manera asistencial. Si el indigente no se encuentra bien o necesita que lo lleven al médico o a un local para que lo asistan, sólo deberá requerir la presencia de los agentes quienes le ofrecerán el servicio. Por parte de los servicios de Emaya tienen orden de reforzar la limpieza de la zona».

Por otra parte y ajeno a la burocracia municipal, Alfonso García, 'el Raspas', cambió en la mañana de ayer de ubicación. Se trasladó unos metros dejando atrás la calle Gabriel Llabrés y ocupando plaza en la entrada de la puerta principal del mercado de Pere Garau.

A las diez y cuarto de la mañana el minusválido importunó a varias mujeres y niños que entraban al mercado y se produjo un incidente con un corpulento hombre de etnia gitana que se abalanzó sobre 'el Raspas' y le dijo: «Como vuelvas a meterte con alguien te voy a rajar de arriba abajo». Acto seguido fueron varios vecinos quienes intervinieron para calmar los ánimos. La Policía Local está realizando una importante labor de control y vigilancia en la zona para evitar altercados.