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JULIO BASTIDA «Mi hija está aterrada y no sabemos qué hacer. Yo no quiero sacarla del colegio, pero tengo miedo a que el día menos pensado me llamen para decirme que le han dado otra brutal paliza», afirma la madre de una menor que resultó agredida hace unos días en el colegio La Salle de Palma.

Al parecer, y según varios testigos, el pasado día 3 de septiembre, una chica de 14 años de edad acudió al centro donde cursa estudios para realizar un examen de recuperación. A la salida del mismo, una compañera de clase, repetidora y de 15 años de edad, acompañada de otra adolescente ajena al centro escolar, comenzó a propinarle golpes, puñetazos y empujones. La cogieron por el pelo y la arrastraron por el suelo hasta que fue socorrida por varios padres y profesores del centro educativo.

La madre de la menor agredida relata: «Yo soy responsable de la seguridad de mi hija hasta que la dejo en la puerta del colegio, de lo que pase dentro yo no puedo hacer nada. La verdad es que estoy muy preocupada porque no se trata de un caso esporádico. Las niña que le pegó, antes de agredir a mi hija ya les había dado a otras dos más. Estamos hablando de una pequeña 'matona' que debería estar en otro sitio», añade muy afectada.

Ultima Hora contactó en la mañana de ayer con la dirección del centro y muy amablemente nos atendió el hermano Ramón Palacios, director de La Salle. El hermano afirma que «está sorprendido de que esta noticia haya salido a la luz pública». «Creo que existen unos protocolos de actuación reglamentarios y nosotros los hemos aplicado. Yo estaba allí cuando sucedió la agresión, al igual que el padre de otra alumna que es agente de policía. Nosotros actuamos rápidamente y hemos abierto el correspondiente expediente. Acto seguido pusimos en conocimiento de Inspección Escolar y la Fiscalía de Menores los hechos sucedidos y a partir de ahora ellos se han hecho cargo de la investigación del incidente. Después, hablamos con la madre de la víctima y le brindamos toda nuestra ayuda y colaboración. Es más, hablamos con la niña y ella sabe que al más mínimo problema o miedo que tenga puede comunicárnoslo y que haremos todo lo que esté en nuestra mano para evitar males mayores», finaliza el hermano.

A consecuencia de la brutal agresión que sufrió la adolescente, la estudiante tuvo que ser trasladada al PAC de Urgencias de Son Serra de la Vileta y posteriormente al traumatólogo del área maternal de Son Dureta. Hematomas por todo el cuerpo, moratones, diversas policontusiones, magulladuras, etc... fueron algunas de las importantes lesiones que sufrió.

La familia de la víctima quiere agradecer el trato dispensado por los profesores del centro y el interés que han manifestado en el tema.