Un operario resultó herido de gravedad ayer por la tarde en una obra de una finca ubicada entre Sencelles y Costitx al hundirse la bovedilla de un forjado, según informaron en fuentes sanitarias. Un segundo trabajador sufrió algunas contusiones y golpes, aunque no fue necesario que quedara hospitalizado.
Minutos después de las cuatro de la tarde el 061 fue avisado de un accidente laboral en la citada dirección y una ambulancia con base en Inca acudió hasta aquella finca. De camino, sin embargo, se cruzaron con una furgoneta que les dio luces para llamar su atención.
La ambulancia se detuvo en el arcén, para interesarse por lo que estaba pasando, y el conductor les explicó que en el asiento trasero llevaba al herido, al que estaba trasladando al hospital.
El obrero, de unos 21 años y de nacionalidad española, se encontraba consciente, aunque se quejaba de fuertes dolores en la columna vertebral. También estaba desorientado, presentaba contusiones y un traumatismo craneoencefálico. Los sanitarios sacaron con suma delicadeza al herido del vehículo y lo inmovilizaron en una camilla. El peligro era que sufriera alguna lesión medular, por lo que esperaron la llegada de una Uvi móvil, que trasladó al operario hasta el Hospital de Inca. La víctima, cuya identidad no ha trascendido, fue atendido de urgencia por los facultativos del hospital, que confirmaron que las lesiones eran de cierta consideración.
La Guardia Civil, por su parte, se entrevistó con los compañeros de los heridos y les tomó declaración sobre las causas del accidente. Los agentes visitaron la obra, en el Camí Vell de Costitx, y la conselleria de Treball también fue informada de las circunstancias del siniestro laboral.
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