Un juzgado de Manacor ha abierto una investigación para determinar si un menor de tres años de edad ha sido víctima recientemente de abusos sexuales. Las diligencias las instruye la Policía Judicial de la Guardia Civil y de momento no se han practicado detenciones.
El caso se descubrió hace unos días, cuando el pequeño experimentó una serie de cambios que alertaron a sus familiares. Al parecer, el niño no podía conciliar el sueño y cuando le pidieron qué le ocurría explicó -a su manera- una serie de datos que alarmaron aún más a sus allegados.
Al parecer fue la madre del pequeño quién decidió acudir al juzgado para que se investigara si el niño había sido víctima de abusos sexuales.
La autoridad judicial se puso en contacto con la Comandancia de la Guardia Civil de Palma, en la calle Manuel Azaña, y la investigación se traspasó al Emume (Equipo de la Mujer y del Menor).
Fuentes judiciales próximas al caso indicaron ayer que las diligencias policiales están en su primera fase de investigación y que, de momento, no se han practicado detenciones porque no se ha podido confirmar si el menor sufrió un ataque sexual.
El niño fue trasladado hasta el hospital de Manacor, donde le sometieron a una exploración para detectar indicios de agresión sexual. El resultado de aquel examen médico no ha trascendido, pero ya ha sido comunicado a los investigadores.
Las gestiones policiales que se han puesto en marcha tratan de aclarar, también, si el menor acudía a alguna escoleta o quedaba al cargo de alguien cuando sus progenitores estaban fuera de casa, trabajando. Desde la Comandancia de Palma el hermetismo sobre el tema es absoluto.
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