Minuto de silencio por Alejandro Ribas. | Pere Bota

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Mallorca despidió en la jornada de ayer a Alejandro Ribas Millán, el bombero de 34 años fallecido en acto de servicio en el incendio de la calle Andreu Feliu de Palma.
A las once y media de la mañana, más de 200 personas se congregaban en la explanada principal del parque de bomberos del Polígon de Son Castelló, donde Alex estaba destinado.
Al emotivo homenaje asistieron numerosas autoridades, encabezadas por la alcaldesa de Palma, Aina Calvo; representantes de las diferentes policías locales de Balears, entre los que se encontraban más de 25 policías de Palma; guardias civiles, agentes del Cuerpo Nacional de Policía, con su jefe superior, Bartomeu Campaner al frente; representantes del Ejército, sanitarios, ciudadanos anónimos, bomberos del turno de guardia -vestidos con la uniformidad- y los compañeros del turno de Alex, que vestidos de paisano presidían la concentración junto a los familiares del fallecido.
Aplauso
El minuto de silencio finalizó con un prolongado aplauso tras el que los familiares del bombero fallecido se fundieron en un abrazo rodeados de las autoridades y de los emocionados compañeros de Ribas, que murió el viernes al caerle encima el falso techo de un local en llamas situado en la calle Andreu Feliu.
Uno de los momentos más emotivos fue cuando hicieron entrada los familiares, entre los que se encontraba un hermano de Alex que en la actualidad forma parte de la plantilla de los Bombers de Mallorca.
También quisieron participar en el sentido homenaje numerosos agentes de la 32 promoción de policías locales de la que Alex formó parte antes de ser bombero. En Sóller, todos los miembros de seguridad también guardaron un minuto de silencio dado que Alejandro había estado destinado en el municipio. Aina Calvo afirmó: «Ha sido un reconocimiento necesario, modesto pero cargado de sentimiento, imprescindible para el cuerpo de bomberos».