Decenas de personas se han concentrado hoy en Santa Ponça para pedir la aparición de Malén Zoe Ortiz. | Vasil Vasilev

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La Guardia Civil, con la colaboración de la Policía Local, Protección Civil y Bomberos, entre otros, reanudó ayer la búsqueda terrestre de Malén Ortiz, la joven desaparecida en Calvià el lunes de la semana pasada. Su padre, familiares, amigos y conocidos realizaron una concentración en Santa Ponça a las 17.00 horas, a la que acudieron unas 200 personas, para pedir a las autoridades que no se relaje la búsqueda.

El padre de la joven, Alejandro Ortiz, manifestó que ellos seguirán buscando y repartiendo carteles por toda la Isla con la imagen de la adolescente, a la vez que dieron las gracias a todas las personas que están ayudando a poder resolver el caso.

La Guardia Civil continúa barajando varias hipótesis aunque la que ha cobrado más fuerza es la que contempla la desaparición voluntaria de la menor. En este sentido el padre de la chica indicó que no cree que «ella se haya ido de forma voluntaria» y criticó que la delegada del Gobierno haya informado públicamente de esta posibilidad porque «ha podido relajar la búsqueda».

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A primera hora de la mañana de ayer se reinició la búsqueda terrestre de la joven en Portals Vells, la zona del casino, playa del Mago y sa Porrassa, entre otras zonas, prestando especial atención a caminos, torrentes, cuevas, cavidades y pozos.

A las 15.30 horas, a la misma hora que se le perdió el rastro hace una semana, también se montó un gran control de vehículos entre la rotonda de Cala Figuera y El Toro.

Por su parte, la madre de la joven realizó un emotivo llamamiento a través de un vídeo para que se ponga en contacto con ella o con la Guardia Civil. En esta grabación de la madre, Natalia Marina Rodríguez pide a su hija con la voz entrecortada que se tranquilice y que si permanece desaparecida por su propia voluntad, que dé ya señales de vida. La madre le solicita que llame a la Guardia Civil, y le asegura que si está «cansada» de vivir con su padre, del que la mujer está separada, «acá está la mamá» para recibirla con «los brazos abiertos» y para darle «todo el amor, la comprensión y el respeto que se merece». También le recuerda que piense en su hermano, y en sus abuelos que tienen ganas de escucharla y abrazarla de nuevo.