Pillada una ladrona robando.

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A pesar de ser 'cazada' in franganti por varias cámaras de seguridad, de contar con 15 antecedentes policiales, perpetrar siete robos y de amenazar de muerte a un discapacitado, el juez la dejó en libertad.

Se trata de un mujer de nacionalidad española y etnia gitana que, con un amplio historial delictivo a sus espaldas, fue arrestada por agentes del Grupo de Robos del Cuerpo Nacional de Policía y acusada de ser la autora de siete robos. De los mismos, cinco de ellos fueron robos con fuerza, un delito de hurto y otro de robo con violencia e intimidación al asaltar un establecimiento y amenazar a un empleado discapacitado.

El primero de los hechos se produjo el día 6 de noviembre. Sobre las 14.40 horas, la mujer accedió al interior de un comercio ubicado en la calle Colliure de Palma y, con un cuchillo, amenazó a un empleado que iba en silla de ruedas y le robó el móvil de alta gama.

Un día más tarde, el siete de noviembre en un local de la carretera de Valldemossa. En esa ocasión, la ladrona aprovechó para acceder al interior del establecimiento y llevarse 700 euros en efectivo y un ordenador portátil.

A partir de ese instante, entre los el día 4 y 12 de diciembre se produjeron el resto de robos. El día 12 de diciembre, en un taller mecánico provisto de cámaras de vigilancia a través de un circuito cerrado de televisión, fue sorprendía in fraganti mientras perpetraba el robo. En las imágenes puede apreciarse como la delincuente accede al taller mecánico, se agazapa entre los vehículos, accede a la oficina y se lleva un ordenador portátil.

Nada más presentarla ante el juez, la mujer fue puesta en libertad con cargos y, sorprendentemente, se perpetró un robo en las proximidades con el mismo modus operandi.