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El miércoles al mediodía, un guardia civil de paisano paseaba por el Port d'Andratx cuando vio como tres individuos de nacionalidad rumana sustraían la cartera del bolso de una turista.

El guardia civil llamó inmediatamente a una patrulla de la Policía Local para que acudiera al lugar de los hechos. Mientras esperaba que los refuerzos llegaran, siguió a las dos mujeres y al hombre hasta un cajero cercano situado en la misma calle. Desafortunadamente, la víctima del robo llevaba el pin de su tarjeta de crédito junto con toda la documentación de la cartera, por lo que fue tarea sencilla para los detenidos retirar el dinero. Fue en ese momento cuando el guardia civil decidió intervenir y se identificó. Las mujeres huyeron pero el agente pudo inmovilizar al hombre quien, para no ser detenido, le intentó sobornar con los 425 euros sustraídos a cambio de su libertad. La patrulla de la Policía Local llegó al poco tiempo, procediendo a la detención de las dos mujeres y trasladándolos a las dependencias policiales. El guardia civil pudo felizmente devolver sus pertenencias a Susana, la asombrada y agradecida turista.