Los hechos, que juzgará mañana la sección primera de la Audiencia de Palma, sucedieron en la madrugada del 7 de febrero de 2014 cuando, según el escrito de acusación, D.C.C., intentó asesinar a sus hijos en la vivienda familiar mientras su esposa dormía.
Las víctimas, un chico que entonces contaba con 6 años y una joven de 21, dormían en la misma cama mientras la madre lo hacía en otra habitación, lo que aprovechó el procesado para introducir un barreño con un litro de salfumán y otro de lejía en el cuarto, colocarlo en el centro de la cama y tumbarse junto a ellos con el fin de matarles y quitarse él la vida, según el fiscal.
La acusación pública reseña en su escrito que la mezcla de hipoclorito sódico (lejía) y ácido clorídrido (salfumán) genera cloro en estado gaseoso, cuya inhalación puede causar la muerte por colapso cardiovascular y parada respiratoria, algo que el acusado perseguía, dado que se aseguró de cerrar la puerta y las ventanas de la habitación.
En torno a las 5.00 horas, la mayor de los hijos, que tiene una discapacidad por dolencia psíquica del 46 %, se despertó con síntomas de asfixia, tos y arcadas, sacó de la habitación a su hermano y despertó a su madre, lo que impidió que se consumara el presunto propósito de D.C.C.
Los dos hermanos fueron tratados por intoxicación, al igual que el padre, quien fue detenido inmediatamente y está preso por esta causa desde entonces.
El hombre, que al parecer mantenía una mala relación con su esposa, había bebido la tarde previa a los hechos, aunque no tanto como para anular sus facultades físicas y psíquicas, y, según la Fiscalía, no padecía ninguna alteración psíquica que perturbara su voluntad.
El ministerio público plantea que se le aplique al acusado la atenuante de intoxicación por consumo de alcohol y la agravante de parentesco, y además de los 14 años de cárcel, solicita que indemnice con un total de 3.600 euros a sus hijos y a su esposa.
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