Los agentes del cuartel de Artà se volcaron en la investigación de la ‘operación Cuala’. | Alejandro Sepúlveda

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Tras meses de investigación, la Guardia Civil del cuartel de Artà ha concluido la llamada operación Cuala', que se ha saldado con la detención de cinco menores a los que les imputan un total de setenta robos en establecimientos hoteleros de Cala Rajada.

Los asaltos se iniciaron a principios de veranos, en cinco hoteles de ese núcleo turístico, perteneciente a Capdepera.

Los ladrones escogían los fines de semana y siempre accedían de madrugada a las habitaciones trepando desde la calle a los cuartos, generalmente plantas bajas y primeros pisos y con los turistas durmiendo dentro. Los afectados que se despertaron en mitad de la noche no pudieron identificar a nadie en el álbum policial de sospechosos.

Hace unos días, la Guardia Civil realizó las tres últimas detenciones y ahora el caso ya está prácticamente cerrado, con todos los implicados identificados. Las diligencias las instruye la Fiscalía de Menores y también ha sido informado un juzgado de Manacor. Dos de los arrestados el miércoles tienen 15 años y el tercero 17. Todos son españoles. Les imputan 70 robos durante el verano.