«Soy española, aunque mi piel sea negra», afirma la mujer, nacida en Guinea y residente en España desde los dos años, en una carta que ha publicado a través del perfil en una red social de la abogada que llevó su caso y consiguió una sentencia favorable de la Audiencia Provincial de Asturias, que ha sido recurrida ante el Supremo.
Abeng, de 19 años, relata en su misiva su historia desde que a los once años tuvo la «maravillosa» idea de acudir a la Guardia Civil creyéndose «europea» y «la reina del mundo» ante la negativa de su madre a que tuviera un comportamiento similar al de las niñas de su edad.
La intervención de los servicios sociales del Principado determinó su ingreso en un centro de acogida al ser declarada en desamparo donde se quedó embarazada a los catorce años «de una persona que ni era príncipe, ni era azul, todo lo contrario», circunstancia que fue advertida por su madre durante una visita de fin de semana a los siete meses de gestación.
«Qué curioso que los servicios sociales que querían protegerme de mi propia madre no pudieran protegerme ellos de un embarazo y ni siquiera se dieran cuenta de que una vida crecía dentro de mí», añade a la vez que relata que en aquel momento se le notificó «muy cordialmente» que el niño iba a ser dado en adopción.
La joven decidió entonces huir de España ayudada por un familiar y trasladarse a Guinea durante un mes y medio aunque optó por regresar -«ojalá nunca hubiera vuelto»- asesorada por un abogado ante el riesgo de que le causase problemas a su madre.
Tras dar a luz sin que, afirma, se le permitiera ver a su hijo, regresó al centro de acogida mientras el bebé fue trasladado a otro donde pudo verlo inicialmente una vez a la semana y luego una hora al mes hasta que a los nueve meses se suspendieron las visitas.
Abeng alude además a una notificación de la jefa de sección de Centros de Menores del Principado en la que ésta admite que hay un conflicto de intereses entre el derecho del niño a tener unos padres y a no crecer en un centro y el suyo como madre a tener relación con él, aunque le recomendó no recurrir el acogimiento preadoptivo del menor dado que lo mejor es que cuente con unos progenitores «que le puedan dar todo lo que tú querrías, pero no estás en condiciones».
Después de que la Audiencia de Oviedo resolviese a su favor, la mujer señala que en agosto acudió a Sueca (Valencia) para recuperar a su hijo sin que los padres adoptivos se presentaran a realizar el proceso de adaptación y que la Guardia Civil tardó un mes en localizarlos para concertar otra cita a la que tampoco acudieron hasta el último día tras ser advertidos de que podían ser detenidos.
«¿Y ahora vienen ustedes a hacer todo este circo mediático en el cuartel de la Guardia Civil, con ambulancia, manifestación, mentiras, calumnias y difamaciones cuando yo podía haber instado su detención, negándome a ello por entender su propio dolor?», añade.
Desmentido
En contra de las afirmaciones realizadas este lunes por el abogado de la familia adoptiva, Abeng asegura que ni es alcohólica ni drogadicta ni ha sido maltratada «jamás» por su pareja y lamenta haber sido seguida por la Policía hasta el centro donde estudia y que sus vecinos fueran interrogados sobre un posible maltrato.
La madre biológica emplaza a los padres adoptivos a no volcar en ella su «rabia, tristeza e impotencia» dado que no fue ella quien los dio en acogida sino que se lo «arrebataron» y que sólo es «una madre que ama por encima de todo a su hijo» y que no ha dejado de luchar por él «desde el mismo momento en que supe que me lo querían arrebatar».
«Sólo soy una chica española de origen guineano que ya no quiere ser europea y que lo único que desea es estar feliz con su hijo. Hijo que tiene una familia, unos abuelos, unos tíos, unos primos y, ante todo, una madre. Y mi hijo no se llama Joan (en valenciano) ni Xuanín (en asturiano). Se llama Juan Francisco», concluye.
16 comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
Juan Francisco , aquí y en Pekin
No confundir negro con pobre. Esta chica la metieron en un centro de menores por una tontería. Ella denunció a su madre pq no le dejaba salir y como el padre vive y trabaja en Suiza...le colaron como desestructurada. Esta familia es de color, pero no pobre. Su padre trabaja como ingeniero enSuiza. El padre del bebe es un trabajador del centro de menores, la historia tiene guasa.
Protección de Menores, como se hacen llamar, es un organismo gubernamental, nadie, ninguno de los que trabajan allí es responsable de lo que les pase a los hijos de las familias a los que les robaron a sus hijos, está todo muy bien organizado, nadie es responsable de nada, quien es responsable es "el organismo", que curiosamente no es ninguna persona, se suele escuchar eso de: "yo tengo que hacer mi trabajo" "yo no sé nada" "yo antes no estaba" "yo no tengo postestad para..." Es un negocio que infla con cantidades de 3000 hasta 6000 euros/mes por niño tutelado a los centros de protección de menores falsamente llamados "hogar" solo les interesa el dinero y conservar su puesto de trabajo, los niños son mercancía, herramientas de trabajo, y los explotan tanto más psíquicamente y físicamente también, los adoctrinan, que no es educar, "educadores" con vidas personales poco ejemplares, etc... Basta ver cómo salen después de haber estado allí, traumatizados para toda la vida....
Los padres adoptivos no acudieron en más de cuatro ocasiones a visitas concertadas con la madre biológica para la adaptación del menor. Chapuza institucional y dos familias perjudicadas. El menor, si no hay informes desfavorables, que no los hay, con la madre que lo trajo al mundo.
La chica era menor, dando luz. Entonces eran sus padres que decidían sobre el nieto. Eran ellos que han firmado los documentos para la pre adopción? Seguro que sí y tenían sus razones. Tampoco entiendo cómo se quita el niño de su entorno así, sin haber conocido su madre por visitas acompañado por autoridades? El único que me da mucha pena es el chico.
Kitar un hijo a unos padres no es de humanos.si acaso castiguen los padres y no al hijo
Segun lo que escribe mcarmen si una familia es pobre no puede tener hijos pues estos seran infelices y desgraciados . Que hacemos ? Hay que tener una vida estable dice. Y hoy quien la tiene? Por otra parte la pobreza y humildad no implican que no sean felices, claro si esta señora mide la felicidad por el dinero que posee la gente si. Pero no todos miden la felicidad por el Mercedes y cuenta bancaria, algunos por los amigos, vecinos salidas y puesta de sol, y fundamentalmente por la familia unida. Que Dios le ayuda mcarmen. Tenga la seguridad que ésta chica podrá ser muy feliz con su hijo, con pobreza o sin ella pero con amor y cariño. A mi me ha pasado.
Y qué estabilidad le puede ofrecer al pequeño ??? Trabaja ??? Gana lo suficiente para mantenerse los dos ??? Para tener un hogar y una vida estable ?? De qué vive ??? En fin, pobre niño ...
Recuerdo una señora, que no tenía donde caerse muerta, como se dice, y en cambio iba con sus uñas pintadas y la cara algo maquillada. La pobre mujer no tenía nada mas, ni ninguna otra alegría, solo maquillarse ella misma y pintarse las uñas. No sea duro si tiene gafas de sol y móvil. Quizás no tenga nada mas.
Aquí solo se habla de padres biologicos o adoptivos pero lo que realmente debería primar es lo mejor para el menor. Puede que la adopción fuera injusta con la madre natural pero, esta reversión, no es injusta con la criatura? Debería primar la estabilidad emocional, moral y biológica del crio. Todo lo demás son egoísmos!