Emerson Mendoza, en el centro, de espaldas, al salir de la cárcel de Palma. | Guillermo Esteban

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Los familiares de Emerson Mendoza esperaban desde la mañana de este jueves su salida de la cárcel de Palma. La espera se alargó. Los allegados lamentaron lo que sucedió aquella fatídica madrugada. «Un accidente, una desgracia que le puede pasar a cualquiera», repiten. Emerson Mendoza es el autor del homicidio de la Nochebuena de 2015 en Gomila. Un jurado popular le juzgó en la Audiencia de Palma el pasado septiembre. Lo declaró culpable de un homicidio imprudente y fue condenado a dos años y cinco meses de cárcel.

El autor de la agresión mortal salió de prisión este jueves a las ocho de la tarde. Ha cumplido un año y siete meses. Mendoza se abrazó a sus familiares. Habló con su madre a través de una videollamada desde Colombia y se disculpó con los allegados del fallecido. «Siento mucho lo que ocurrió, fue una situación límite, estoy muy arrepentido».

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La Nochebuena de 2015, Emerson Mendoza, colombiano de 37 años, acudió a una discoteca de Joan Miró con familiares y amigos. Un grupo de personas, entre las que estaba la víctima, molestaron a su hijastra. Los vigilantes de seguridad del local expulsaron a los provocadores. Mendoza se encontró a la salida con el joven con el que había discutido antes. Michael Andrés, colombiano de 26 años, intentó romper una botella de cristal contra el suelo. Mendoza cogió otra botella, la rompió y se le clavó. El joven murió poco después. La agresión se registró en un vídeo de un testigo y sirvió como prueba fundamental en el juicio.

El Tribunal Superior de Balears ordenó la repetición de la vista porque el jurado popular no explicó que Mendoza no tuviera intención de matar. El Supremo tumbó la resolución y confirmó que fue involuntario: No quiso matar a Michael Andrés.