El acusado entró al despacho de su superior y grabó en dos cedés información personal y profesional. Días después se los hizo llegar al alcalde a través de una instancia que él mismo registró en el Ayuntamiento de la localidad.
El juez considera probado que el procesado se apoderó de determinada documentación, sobre todo datos bancarios y fotografías personales del jefe de policía, sin autorización ni consentimiento.
Durante la vista, el perjudicado, defendido por Eduardo Valdivia, relató cómo se sintió al descubrir que un agente había copiado información de su ordenador. «Estuve muy mal, me afectó a mi salud y en mi vida familiar. Había fotos de mi mujer, de mis hijos, de mis nietos e incluso la cartilla del banco», relató en sede judicial.
El alcalde de la localidad desveló el «carácter conflictivo» del acusado. El policía, relevado del cuerpo, se negó a declarar y se remitió a su declaración en fase de instrucción. Allí, el agente reconoció la entrada de los dos cedés aunque negó que el contenido de los mismos fuese de carácter personal. Ahora ha sido condenado a un año y tres meses de prisión y al pago de 1.500 euros a su antiguo jefe. El Ayuntamiento de Capdepera, defendido por el abogado Agustín Aguiló, quedó absuelto de cualquier responsabilidad.
3 comentarios
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El justiciero de Capdepera delante en lidel te cascaba dos o tres multas o te quitaba el coche. Con la benoplaciencia del Alcalde...
Es decir...un policía investiga a su jefe y lo denuncia al superior de su jefe con pruebas....y acaba él en la cárcel. Hm...vale...tiene muuuuucho sentido.
Qué le impediría al encartado reiterar sus argumentos y razones ante el tribunal que le juzgó. Supongo que una estrategia de defensa....que pudo constituir una equivocación, porque si él pensó inicialmente -supongo que por ahí iría la cosa- que no resultaba delictivo extraer información de un ordenador instalado en un despacho oficial para a continuación ponerlos a disposición de una autoridad local, debía decirlo claramente ante los que le juzgaban, en vez de remitirse formulariamente a una declaración previa. Al hacerlo así, simplemente vino a reconocer implícitamente que, pese a ser policía -es decir, con un plus de conocimiento en este tipo de cuestiones sobre el ciudadano medio- no había tenido un buen enfoque mental del asunto.