Agentes de la UFAM de la Policía Nacional, al frente de la investigación. | Alejandro Sepúlveda

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Un niño de tan sólo trece años asestó este pasado domingo un total de siete puñaladas a su propio padre en un chalet de Palma.

Agentes de la UFAM (Unidad Familia Mujer) del Cuerpo Nacional de Policía han iniciado una investigación con la finalidad de esclarecer las causas que motivaron al menor a cometer esta acción.

Según fuentes próximas al caso a las que ha tenido acceso Ultima Hora el incidente se produjo en el domicilio familiar. En un momento dado, el niño acudió a la cocina, cogió un cuchillo y se dirigió hasta donde se encontraba su padre. Una vez allí le asestó hasta un total de siete puñaladas. Afortunadamente, las mismas no alcanzaron ninguna zona vital y el progenitor pudo defenderse y repeler la agresión.

Todas las puñaladas fueron a parar a la zona del hombre, cerca del cuello. El hombre fue atendido de urgencia en el hospital de Son Espases, donde se recupera de las lesiones. El menor, que no puede ser detenido al ser completamente inimputable (menor de 14 años, según la legislación española), sufrió algún tipo de transtorno. Los investigadores tomaron declaración al mismo y éste sostiene que «escuchaba voces que me decían que tenía que matar a mi padre».

La Policía Nacional puso los hechos en conocimiento de la Fiscalía de Menores y autoridad judicial. Una de las hipótesis apunta que el detonante pudo ser una discusión por un teléfono móvil.

En esta información se omiten datos personales y de ubicación para proteger a las víctimas.