La Policía Judicial de la Guardia Civil trabajaba anoche en la finca, tratando de aclarar los hechos. | Pere Bota

TW
9

Biel Payeras, un hombre de 76 años, murió en la tarde de este viernes después de que un toro lo corneara en una vaquería ubicada en la carretera de Inca a Binissalem, todavía en el término municipal de la primera ciudad. La Policía Judicial de la Guardia Civil se ha hecho cargo de la investigación y al cierre de esta edición los agentes trabajaban en la finca para esclarecer los hechos. Según informaron en fuentes del 061 y de la Benemérita, el suceso tuvo lugar sobre las 19.25 horas, en la finca de Can Ripoll, a un kilómetro de Inca, en dirección a    la carretera de Binissalem.

El septuagenario, que es el propietario del supermercado Can Coric de Inca, en la calle Fray Juníper Serra, se encontraba cuidando a las vacas en un corral cuando, de improviso, un toro lo derribó y lo pisoteó. El hombre sufrió varias cornadas entre la ingle y el abdomen y quedó tendido en el suelo, con una gran hemorragia, aunque pudo pedir ayuda. Cuando las ambulancias del 061 y policías locales de Inca llegaron a la vaquería, los médicos no pudieron hacer nada por él y confirmaron el fallecimiento. La finca quedó precintada a la espera de los agentes de la Policía Judicial, que se hicieron cargo de las pesquisas.

El cuerpo sin vida del dueño de la finca fue trasladado por la empresa funeraria hasta el instituto anatómico forense, donde está previsto que se le practique la autopsia en los próximos días. Las fuentes consultadas no pudieron aclarar si las heridas de asta se debían a una única cornada, con una trayectoria de entrada y otra de salida, o si, por el contrario, el toro lo había empitonado de forma repetida. El caso ha causado una gran consternación en Inca.