El autocar se precipitó por un desnivel de dos metros y acabó volcando a orillas de la carretera. | Assumpta Bassa

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Los 50 pasajeros que viajaban en el autocar siniestrado este lunes en la carretera que une Sant Llorenç y Son Servera se han llevado el susto de su vida. A primera hora de la mañana, el vehículo en el que viajaban se precipitaba por un desnivel de dos metros en una curva de la carretera MA-4030, concretamente en el punto kilométrico número 5, para terminar volcando a orillas de la calzada.

Eran turistas del Imserso, procedentes en su mayoría de Lugo y de Zaragoza, pero también de otras ciudades de Castilla y León y Canarias, que estaban alojados en dos hoteles de Playa de Palma y se dirigían a las Cuevas del Drach. La excursión, que estuvo a punto de acabar en tragedia, se truncó cuando el autocar se salió casualmente de la carretera, sin que se vieran implicados otros vehículos, dejando un balance de 24 heridos, siete de ellos graves.

Inicialmente, 10 heridos fueron trasladados al hospital de Manacor, 5 al hospital Son Espases de Palma, 5 al de Llevant, 5 al de Son Llàtzer y 2 al hospital de Muro. Nueve de ellos continúan ingresados en Manacor, Son Espases y Son Llátzer.

El ejecutivo regional ha habilitado el teléfono 900 712 112 para informar y prestar asistencia a las personas afectadas por el accidente.

Emergencias acudió rápidamente

Nada más producirse el vuelco se vivieron unos primeros momentos de tensión y pánico. Los pasajeros no eran del todo conscientes de lo sucedido, según sus propios testimonios, y sólo se escuchaban gritos. Muchos de ellos sufrieron ataques de pánico pero, poco a poco, la mayoría pudieron abandonar el vehículo por sus propios medios. Y los servicios de emergencia no tardaron en llegar.

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Los propios afectados han subrayado la rapidez con la que aparecieron las ambulancias y los bomberos. «Han venido de las dos direcciones y se han juntado todos aquí», relataba una de las testigos.

Se desplazaron hasta el lugar del suceso para atender a las víctimas agentes de Tráfico de la Guardia Civil, Bombers de Mallorca (con efectivos de los parques de Manacor y Artà, además de un sargento y dos técnicos), Emergències del 112, Protección Civil, Policía Local de Sant Llorenç y de Son Servera y personal sanitario del SAMU-061, que movilizaba 4 UVIS móviles, 6 ambulancias básicas, un vehículo medicalizado de transporte colectivo, e incluso un helicóptero, con el que se trasladó a Son Espases al más grave de los heridos. También se desplegó a pie de carretera un hospital de campaña.

Exceso de velocidad

El conductor, que resultó ileso y dio negativo en las pruebas de alcohol y drogas, alegó en un principio que el motivo del accidente podría deberse a un fallo mecánico del autocar. La investigación apunta, sin embargo, a que una distracción o un exceso de velocidad podrían ser las verdaderas causas tras el siniestro.

Agentes de la Guardia Civil de Tráfico han hallado marcas de frenada en el tramo final de la curva y trabajan sobre la hipótesis de que el conductor se distrajo, por causas que se desconocen, y perdió el control del vehículo que acabó volcando. También apuntan a que el autocar estaría circulando a una velocidad inadecuada y que las marcas de frenado se produjeron tarde.

Además, el autocar es de matriculación relativamente reciente -no llega a los dos años de antigüedad-, lo que restaría fuerza a la posibilidad de un fallo mecánico del mismo.

En todo caso, habrá que esperar a los resultados de la investigación, que incluye el análisis del tacógrafo del autocar y de la documentación del vehículo, así como de las declaraciones de los testigos, especialmente los que viajaban en los asientos delanteros, para poder establecer una conclusión definitiva.